sábado, 30 de septiembre de 2017

Me gustas...

Me gusta la forma en la que desnudas mi nombre cada vez que me llamas,
la forma en la que destruyes las barreras y me haces tuyo,
ese minúsculo momento en que nace tu sonrisa,
el susurro que guardas y me explotas al oído,
la manía de tu ser por maniatarme,
las sensaciones en mi pecho cada que puedo mirarte,
el sincero brote de ternura en tu ojos,
y sí, me gusta la forma en la que me riñes,
la manera que tienes de volverme loco, casi literalmente,
tus piernas delgadas y largas,
ese hueso de tu cadera que me invita a pecar,
tu sonrisa al saber que pecarás conmigo,
ese destello de pasión que enciende la flama.

Me gusta imaginarte mientras escribo,
pensar que ya eres mía y yo soy tuyo;
congelarme en esos momentos,
en esas memorias,
en lo que nunca pasó,
en aquello que nos deparan las palabras no dichas;
y sí, me gusta pensar en que me quieres,
así, en tus silencios,
en tu lejanía,
en tus te quieros sinceros,
en la forma en que me besas.

Me gusta pensar en todo eso y en nada,
en ti y en mí,
en lo que no somos, en lo que somos y en lo que no seremos, o podríamos ser.

Me gusta imaginar los imposibles de amarte,
o esa forma tan tuya de decirme que no me rinda,
en fin, me gustas...

domingo, 17 de septiembre de 2017

Déjame...

Déjame viajar en ti,
descubrir tu cuerpo,
ser ese conquistador que te descubra,
que beso a beso te mida,
que te sonría y te busque.

Déjame ser quien te abrace por la tarde,
que descubra tu pasión,
que deje salir tu deseo,
que comulgue contigo.

Déjame ser quien te nombre,
que descubre el manantial de tu vida,
de tu sinfonía de amor,
de tu cuerpo y de tus curvas.

Déjame estar contigo,
déjame ser quien te redescubra,
quien te toque como nunca.

Déjame terminar de saber a que sabes,
de saber a que huele tu deseo,
a descansar sobre tus muslos,
sobre tus pechos redondos y perfectos,
sobre tus valles y tus montañas.

Déjame tocarte,
déjame besarte,
déjame ser tuyo,
tan solo una vez...

miércoles, 13 de septiembre de 2017

Tan solo un beso...

Y otra vez me vuelves a besar
con esas ganas que me matan
tu mano apretando la mía
tus labios arrancándome el alma
tu sonrisa enamorándome.

Ahí donde había dejado mis miedos
donde tu esencia surca mis anhelos
donde el deseo me desborda
donde nacen los albores de tu luz
en ese momento en el que me miras.

Luz y fantasía
tambores y metales
una estampida dentro de mí
tus labios me rozan
apenas un cúmulo de piel
apenas mis sentimientos
al rojo vivo mi anhelo de quererte.

Tan solo un beso que devuelve la esperanza
que sonríe y que aprieta
que me dice ven
que me mata y me revive.

Un beso de tu boca
un beso de mis sueños
un beso de mis anhelos
un beso de verdad.